A propósito del aniversario de Linux, revisemos una antigua columna de Jo. Piquer.

El error es una fuerza motriz ay del humano que no yerra nunca! si Colón no se hubiera equivocado no existiría América del Sur si no se hubiera equivocado Hitler no existiría América del Norte si no se hubiera equivocado Mahoma todos ahora seríamos musulmanes.  

Nicanor Parra, Nuevos Sermones y Prédicas del Cristo de Elqui.

Hemos tomado una decisión histórica: por primera vez vamos a comprar un PC en vez de una estación de trabajo para nuestro proyecto de investigación.

Mi relación con los PC's ha sido de odio profundo desde su aparición en el mercado. Llegué a amar los primeros micro-computadores, pero IBM con sus PC's siempre me desagradó. Me tocó intentar desarrollar algunos programas en C, cuando los punteros no podían llegar muy lejos, cuando todo se caía cada cinco minutos y los diskettes se doblaban.

He de confesar que mi amor de entonces (en el tiempo que quedaba libre después de intentar botar el gobierno) eran más bien los Mainframes, Vax/750 primero (amor imposible) e IBM/370 después. Al poco tiempo, conocí a Unix en un pequeño NCR Tower. Lo más atractivo era lo pequeño que era, y lo fácil que era entender como todo funcionaba (y no funcionaba) en él. Alguna vez lo tuve funcionando con el disco duro en la mano, y esas son cosas que no se olvidan fácilmente.

En Francia me tocó vivir el hechizo de las estaciones de trabajo, con sus pantallas gigantes, su diminuto tamaño y la magia de las redes TCP/IP y de Internet. De vuelta en Chile, me he encargado de promover su uso y masificar su acceso por parte de los estudiantes. Sin embargo, ahora me compro un PC. Traición a la causa?

Claro que los PC's de hoy no se parecen en nada a los originales. Compramos un equipo con Zentium, con pantalla grande, 32 Megabytes de memoria y 1 Gigabyte en disco. El software será Linux, obteniendo así el equivalente a una estación de trabajo rápida y más cara. Nuestra idea hoy día, es que para uso personal en red, un PC es mejor alternativa que cualquier estación. Sin embargo, esto no es cierto para el caso de servidores, ni para equipos multi-usuarios. Los algoritmos de memoria virtual y administración de procesador parecen no estar tan afinados como los de los sistemas con más tiempo en el mercado.

Me parece que los PC's han ido corrigiendo sus errores. El procesador ya es uno decente, sin limitaciones absurdas (aunque con algunos bugs incluidos!). El software deja mucho que desear, pero equipando con Linux mi sistema, tengo un verdadero sistema de 32 bits, listo para Internet, X-windows, verdaderamente multi-tasking y gratis. Por otro lado, tiene todas las gracias de un PC: es un hardware abierto cuyas componentes son muy baratas y fáciles de obtener.

La experiencia nos mostrará si nos equivocamos, pero creo que ha llegado el momento en que un PC bien vestido es equivalente a una buena estación de trabajo, y tal vez ya sea hora de reconciliarnos.